EN
TU MEMORIA, MI COMANDANTE SUPREMO Y ETERNO
Mi Comandante Supremo y
Eterno Hugo Rafael Chávez Frías, usted cruzó el umbral de la eternidad, empero su
legado es imperecedero.
Me brindó la extraordinaria
oportunidad de servirle como su Edecán, fue una excepcional experiencia para obtener
de primera mano sus sabias enseñanzas y acertados consejos al escucharlo
hablar, así como lo evidencié en cada día de su incesante actividad, dando
ejemplo de abnegación a todo el personal que le acompañamos, él nos decía
regularmente “cuiden siempre los detalles”, de hecho puedo recordar la última
vez que lo hizo, simplemente era su forma de ser y se interesó en inculcarnos
esas cualidades admirables.
Yo siempre sentí que nos guardaba
un gran afecto en lo personal y respeto por nuestra labor, sin embargo aunque
no lo dijo de manera prolija nos lo demostró fehacientemente, por supuesto el
sentimiento era reciproco, nosotros le profesamos un profundo cariño comparable
al que los hijos pueden sentir hacia su padre, porque eso era él para nosotros,
para el equipo de trabajo fue lo más importante, lo recordaré así y como el
gran líder de la patria que lo vio nacer, de la misma manera que lo hace todo el
heroico pueblo soberano de la República Bolivariana de Venezuela.
Pienso en él todos los días
de mi vida, evocando recurrentemente aquellas palabras que pronunció cuando se
hizo responsable de la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992, “…por ahora…”
apresuro la mente de vuelta hacia aquel día de mi juventud, subteniente alzado
en armas, en ese momento asumieron un significado distinto al que tienen ahora,
fueron más una esperanza muy lejana en el futuro, que la asertiva premonición evidenciada
hoy día, ellas se convirtieron con el devenir del tiempo, el coraje y amor de
un país en, para siempre…
Se preocupó por todos y
estuvo pendiente de todo, hay una revolución en marcha gracias a su denodado
esfuerzo, su voluntad inquebrantable además de su visión positiva del porvenir,
nosotros como venezolanos a menudo sentimos su presencia como si estuviera
físicamente en este plano existencial, muchas cosas buenas sucedieron durante
su gestión de gobierno y muy seguramente van a seguir ocurriendo. Somos
referencia en el mundo gracias a él, ahora en todo lugar del orbe se tiene
conocimiento que en la parte más septentrional del continente sur americano
existe un país en plena transformación hacia el desarrollo sustentable, un
pueblo pujante que dirige sus esfuerzos hacia la verdadera emancipación, sin
dejar de lado las alianzas con naciones en torno al bienestar común, procurando
la geopolítica multipolar, un ideal concebido en base al Socialismo del siglo
XXI y vitalmente inspirado en el pensamiento de El Libertador Simón Bolívar.
Mi Comandante Supremo y
Eterno, nos dejó tareas pendientes que prontamente seremos capaces de asumir y
resolver con esfuerzo participativo. Tal vez encontraremos algunos obstáculos,
pero eso no será excusa para el cumplimiento de nuestras obligaciones y el de
las personas que las sigan después de nosotros, no importa cuán difíciles sean.
En tu memoria.
Pedro José Caldera Pérez
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